Te hé de hacer caso
algun dia...
quizas cuando
crezca.
Cuando mi razon
y mi cordura
sean tan solo
una salsa espesa,
que tengas que aclarar
con dulzura, agua tibia
y un poquito mas
de paciencia.
jueves, 6 de noviembre de 2008
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1 comentario:
Receta para cocineros solitarios:
En primer lugar hay que buscar un puchero lo suficientemente grande para que entren todos los ingredientes, y que nos sobre un poco de espacio por si nos llega alguno de improviso.
Se llena con una parte de ilusión, otra de ganas de tenerla (este ingrediente es difícil de encontrar, pero suele florecer por ganas de que florezca.)
Dos partes de deseo de vivir(no confundir con la ilusión, es parecido, pero este ingrediente tiene que estar en estado puro, el otro se puede fabricar convenientemente y al gusto.)
Y lo más importantes de esta receta son las especias, amor, pasion, madrugadas, poesias, eternidades de cinco minutos... y paciencia, cotidianidad, listas de la compra... risa, y yo soy tu pero no te resto y tú eres yo pero no me divides.
Si te sale, guárdame un platito...
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